Comunicado del sitio de energía - 26 de abril de 2012
AUSTIN - Las comunidades comenzarán a ver reparaciones y rehabilitación en carreteras utilizadas con frecuencia por la industria energética después de que la Comisión de Transporte de Texas aprobara el jueves $ 40 millones para proyectos de mantenimiento y mejora de seguridad relacionados con las actividades de la industria.
La industria energética ha ayudado a Texas a seguir siendo un líder económico entre los estados, pero los impactos posteriores en carreteras y puentes, tráfico, seguridad y medio ambiente han provocado la necesidad de colaboración para disminuir los impactos.
El Departamento de Transporte de Texas (TxDOT) comenzará el trabajo este verano, ya que se firman y ejecutan contratos para reparar y ampliar algunas carreteras, y hacer mejoras en las intersecciones a otras. Los fondos apoyarán proyectos ubicados en el norte y sur de Texas.
TxDOT también formó recientemente un grupo de trabajo de nivel ejecutivo para estudiar el tema y se está asociando con representantes del Departamento de Seguridad Pública, el Departamento de Vehículos Motorizados, la Comisión de Ferrocarriles, la Comisión de Calidad Ambiental de Texas, los condados y los sectores de energía y camiones para encontrar formas de abordar la situación.
"Este financiamiento es un pago inicial para tratar de abordar parte del problema ahora", dijo Phil Wilson, director ejecutivo de TxDOT. "Incluso cuando comencemos esta primera fase de trabajo, continuaremos asociándonos con líderes de la industria y del gobierno para construir una estrategia sostenible a largo plazo".
TxDOT, trabajando para cumplir su misión de trabajar con otros para proporcionar soluciones de transporte seguras y confiables para Texas, cree que este esfuerzo de colaboración permitirá a la agencia cumplir con sus objetivos de mantener un sistema seguro, abordar la congestión, conectar a las comunidades de Texas y convertirse en la mejor agencia estatal de su clase.
La agencia se centrará en satisfacer la necesidad más crítica: la seguridad. En última instancia, tanto el público viajero como la industria se benefician de un sistema de infraestructura de transporte seguro y saludable.